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98.6 FM La radio local de Burgos
Lunes, 17 de Junio de 2013
Los periodistas de Burgos -nos figuramos que también los de otros sitios- estamos la mayoría, aunque ninguno se atreva a confesarlo públicamente, "hasta el gorro" de un buen número de políticos y de gabinetes de prensa, así como del trato que nos dispensan.No sólo nos utilizan la mayor parte de las ocasiones, sino que incluso, hasta se permiten la licencia de valorar nuestro trabajo, cuando ellos suelen ser los principales culpables de que la actual coyuntura no dé pie al trabajo serio y profesional, por mucho que lo intentemos.
Radio Arlanzón
Raro es el día que no hay convocadas cinco o seis ruedas informativas, habiéndose llegado a contabilizar hasta catorce algún viernes, además de otro número considerable de actos públicos, privados o publicitarios que también reclaman nuestra presencia.La crisis, de la que los políticos son unos de los principales responsables, sino los primeros por su permisivilidad y complicidad con los autores directos de la misma, se está llevando por delante a un número importante de buenos profesionales (lo que EL CONFIDENCIAL lamenta) y afortunadamente también, a un número mayor de malos periodistas, que pensaban y siguen pensando que esto era y es jauja.Las convocatorias se hacen tarde y muchas veces hasta mal (los datos son erróneos) y de eso el ayuntamiento de Burgos se lleva la palma, con un Director de Comunicación que nos cuesta a los ciudadanos cerca de 54.000 euros al año, incluida la Seguridad Social.Luego los convocantes llegan tarde, no se han preparado los temas, se eternizan queriendo decir algo sin decir nada, con asuntos sin contenido, hablando especialmente para la foto y el papelín, cuando no nos encontramos con presencias esperpénticas, incluso hasta con espontáneos que se permiten opinar y preguntar.Y el colmo es ahora, cuando los integrantes de las diferenes formaciones se están acusando entre ellos de que "se copian" los temas y las convocatorias. Los hay incluso quienes hasta manifiestan que los propios compañeros de partido se basan en sus opiniones para luego dar su propia rueda informativa y así poder gozar de "unos minutos de gloria". !Probrecitos!
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