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98.6 FM La radio local de Burgos
Miércoles, 1 de Abril de 2015
Una vez conocido el informe de Auditoría de Cuentas del Consorcio del Desvío Ferroviario se sabe ya que, a fecha de 31 de diciembre de 2014, la deuda del consorcio era de más de 167 ME.
Radio Arlanzón
Tras aprobarse un convenio en 2014, firmado por el alcalde de Burgos y el concejal delegado del consorcio, el vicealcalde, Ángel Ibáñez, con los presidentes de las fundaciones de Caja de Burgos y de Cajacírculo, se acordó no pagar en 2014 y 2015 las amortizaciones y sólo pagar los intereses. El Ayuntamiento se comprometió a aportar al consorcio, como anticipo, 1,2 millones en 2013 y 1.750.000 en 2014.
En abril del 2016, el Ayuntamiento tendría que pagar casi 37 millones de euros, de amortizaciones e intereses de los préstamos, en 2017 tendría que abonar otros casi 37 millones, en 2018 otro tanto, y al quinto año más de 11 millones, mientras que hasta 2028, cuando acaban la totalidad de los préstamos, otros más de 44 millones de euros. El concejal socialista Antonio Fernández Santos dice que es imposible que se pueda pagar. Si no se tiene el dinero el 1 de enero del 2016 se disuelve el consorcio y el Ayuntamiento tendría que asumir toda la deuda, más de 167 millones de euros.
El Grupo Municipal Socialista propone que no se disuelva el consorcio y que se negocie una nueva reestructuración de la deuda con un fondo para pagar los intereses y un tanto de la amortización.
Además, el dinero que debe pagar el Ayuntamiento al consorcio en 2015, 1,7 millones, por decisión del alcalde, no se va a abonar, un acuerdo que está en el convenio y aprobado por el Pleno Municipal. El argumento "peregrino" que da el alcalde, según Fernández Santos, es que el consorcio ha tenido el ingreso de la venta de la parcela de Juan Ramón Jiménez, a Mercadona, lo que le ha supuesto unos ingresos de 3,5 millones, y ya tendría dinero para pagar los intereses de este año.
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