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98.6 FM La radio local de Burgos
Jueves, 16 de Marzo de 2006
El Colegio de Arquitectos de Castilla y León defenderá con todos los medios a su alcance, la permanencia de la Escuela de Aparejadores en el Polígono Río Vena, ante los planes de la Universidad de Burgos de vender los terrenos donde se encuentra . Para los profesionales de este Colegio, el inmueble que se construyó en 1963, es uno de los edificios de esta época, más singulares de Burgos. El Colegio de Arquitectos de Castilla y León (demarcación de Burgos) homenajea estos días al responsable de su diseño, al ya desaparecido Ignacio Santos de Quevedo. Arquitecto burgalés que entre otros inmuebles diseñó también, los edificios Beyre, la reforma del seminario San Jerónimo o el edificio de Escuelas Padre Aramburu.
Radio Arlanzón
En la sede del Colegio de Arquitectos de Plaza Virgen del Manzano (en horario de 9 a 14:30 y de 16:30 a 19:00), los burgaleses pueden conocer la obra más emblemática de este arquitecto, en la ciudad. Aquí permanece hasta el próximo 21 de abril, una muestra de 26 paneles y un vídeo, donde se recoge un recorrido de los trabajos más importantes de Ignacio Santos de Quevedo, durante los años 60 y 70. Un precursor para su época, estudioso además de muchos asuntos derivados del urbanismo que hoy en día son parte del trabajo de firmas y empresas del sector. Su obra ha sido calificada como “Estructuralismo orgánico”, dentro de la corriente de arquitectura contemporánea. Y entre los edificios que diseñó, destaca la Escuela de Aparejadores. Inmueble que defiende a ultranza el Colegio de Arquitectos de Burgos por su valor arquitectónico y funcional. De ahí, que los profesionales del colegio no vean con buenos ojos los planes de la UBU de vender los suelos donde se encuentra. Eso significaría su desaparición. El presidente del Colegio, David Dobarco, recuerda que el edificio está dentro de los inmuebles que se deben proteger, según el ordenamiento urbano de la ciudad. Dobarco reconoce la figura de Ignacio Santos de Quevedo. Tras el relativo periodo de reflexión que debe pasar antes de valorar la arquitectura, el responsable de los arquitectos de Burgos cree que ha llegado el momento de hablar de la importancia del trabajo de Quevedo durante los años 60 y 70 aunque su labor abarca hasta el 2.000, año de su muerte. Unos trabajos metódicos, arquitectura de transición con influencias de la italiana. Para Dobarco, Ignacio Santos de Quevedo fue un avanzado en su tiempo por sus estudios sobre la ejecución de las obras o sobre el urbanismo. Muchos de los edificios que diseñó para la ciudad de Burgos, los vemos todos los días. El Hotel Ciudad de Burgos, la ampliación del Colegio La Merced o la residencia de Ancianos de Villímar. ´Para David Dobarco, nuestra arquitectura es discreta pero no por ello debe pasar desapercibida. Un ejemplo es el trabajo de Ignacio Santos de Quevedo. Aunque su estudio estaba en Madrid, creó importantes proyectos para Burgos. En la muestra ha colaborado la hija del arquitecto. Sara Santos de Quevedo comentó hoy cómo no ha sido fácil escoger qué mostrar en la exposición, entre 40 años de trabajo.
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