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Jueves, 19 de Abril de 2012

Comisiones Obreras defenderá medidas no traumáticas para el personal en el proceso de integración Banca Cívica-CaixaBank

Los delegados sindicales de Comisiones

Obreras en Caja de Burgos-Banca Cívica y CaixaBank defenderán un proceso

negociado y no traumático de reorganización del personal si finalmente se

consolida la integración de ambas entidades. Por el momento, los representantes

de los trabajadores no tienen información sobre las consecuencias laborales de

este proceso ni del posible cierre de oficinas.


Radio Arlanzón

La Casa del Cordón ha sido el lugar escogido para una reunión de coordinación y trabajo de los delegados sindicales de Comisiones Obreras, de cara a ir preparando la representación y defensa de los trabajadores ante la integración de Banca Cívica en Caixabank. Lo más importante para el sindicato es el personal, provenga de donde provenga, por lo que abogan por medidas no traumáticas y negociadas en la reorganización de plantillas. El secretario general de COMFIA-CCOO La Caixa en Castilla y León, Norberto Rodríguez, está convencido de que el proceso no tiene que ser duro y que se puede llega a acuerdos, con prejubilaciones, por ejemplo, de acuerdo con la normativa actual. La reunión de esta mañana ha sido una primero toma de contacto entre los representantes de Comisiones Obreras en Caja de Burgos y los de CaixaBank, puesto que formalmente todavía no se ha llevado a cabo el proceso de integración. Tampoco se han realizado reuniones entre los representantes de los trabajadores y las direcciones de ambas entidades, aunque el próximo lunes tendrá lugar la mesa laboral de Banca Cívica en Madrid, y habrá más reuniones en el futuro, según Jesús Zamanillo, secretario general de COMFIA-CCOO Caja de Burgos. Zamanillo recuerda que Caja de Burgos parte de una situación histórica de escasez de trabajadores. En estos momentos, Banca Cívica cuenta con 600 trabajadores en Burgos, mientras que La Caixa tiene 89, y no saben todavía como les afectará la reorganización tras la integración. Lo mismo ocurre con el posible cierre de oficinas. Son conscientes de CaixaBank quiere crear una red comercial y que, donde existan duplicidades, cerrará oficinas, pero intentarán por todos los medios que eso afecte lo menos posible a los trabajadores. En ello han insistido tanto Zamanillo como Rodríguez. Sobre el futuro de la sede central de Caja de Burgos, la Casa del Cordón, y las posibilidades de convertirla en el centro de operación de CaixaBank en Castilla y León, los representantes de Comisiones Obreras no opinan, porque consideran que se trata de una decisión comercial.




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